La gran incógnita para el viernes: ¿Permitirá la burocracia jugar a Mark Payne, estrella del CB Granada?

Mark Payne (ideal.es)

Es una de las grandes incógnitas para el partido de este viernes: Mark Payne, el llamado a ser fichaje estrella del Granada para esta temporada, ¿jugará contra el Clavijo?

Su caso curiosamente no responde a ninguna lesión ni cuestión deportiva, sino a la mera burocracia. La situación es fácil: el CB Granada (al igual que el Menorca) tiene sobre sí un veto de la FIBA, debido a sus deudas contraídas con diferentes jugadores extranjeros, durante los años ACB (Richard Hendrix, Andre Owens). El veto, a grandes rasgos, significa que el máximo organismo internacional no concede el transfer de ningún jugador procedente de una liga fuera de España, mientras no se subsanen las deudas. Ello en la práctica significa que estos equipos sólo pueden fichar jugadores procedentes de cualquiera de las ligas españolas.
En el caso del Menorca, Berrocal lo tuvo claro y este verano ha armado una auténtica selección española de LEB Oro (David Navarro, Jorge Jiménez, Arteaga, Bas...), con la guinda de un americano ya clásico en la categoría, Taylor Coppenrath, que puede fichar porque no necesita pase internacional, al estar ya en España.

Granada se ha encontrado sin embargo con un conflicto gordo, generado esa peligrosa cuestión que siempre son las 'posibles interpretaciones de la Ley'.
Los andaluces han montado también un equipo con una principal base nacional, y sus foráneos o ya estaban en el equipo (Mamadou Samb) o en la liga (Piwi García). Pero la principal apuesta es la que ha motivado la controversia: Mark Payne, un escolta de raza blanca y tirador extraordinario... recién salido de la Universidad.
Ahí comienza la polémica: el club nazarí defiende que el jugador nunca antes ha militado en un club profesional y que por tanto no requiere seguir el procedimiento habitual, pero la FIBA no lo ve así. El asunto, que también ha metido por medio a la FEB (que es quien tramita las licencias en último término), está ahora mismo enquistado y con incierta solución.

Para acabar la ecuación, se da la circunstancia de que Payne sí realizó la pretemporada con el Granada, cuajando además unos más que interesantes números, que le colocaron entre las referencias anotadoras del equipo. Sin embargo, el mazazo llegó al empezar la liga: no había llegado la licencia y no pudo jugar.
El Cebé ganó en Mallorca con sólo nueve jugadores, al contabilizar las bajas de Samb... y Payne. Roberto Guerra hizo entonces del americano para liderar a su equipo (17 puntos), lo que no quita para que lo vayan a echar de menos.

 ¿Debutará Payne este viernes? Probablemente no lo sabremos hasta el último momento...